En el transcurso de nuestro viaje por Tailandia tuvimos la oportunidad de ver varios paisajes impresionantes, entre ellos las Cascadas de Erawan. Este conjunto de siete cataratas se encuentra en la región de Kanchanaburi, al oeste de Bangkok. La capital de la zona, también llamada Kanchanaburi, recibe muchas visitas de viajeros interesados en conocer el famoso Puente sobre el Río Kwai, pero también es una buena base para hacer excursiones como la del Ferrocarril de la Muerte o la que os proponemos a continuación.
Cascadas de Erawan (Kanchanaburi, Tailandia)
Las Cascadas de Erawan se encuentran en el Erawan National Park, a unos 75km de Kanchanaburi y 190km de Bangkok. Este parque cubre un área de 550km² y tiene varios puntos de interés -entre ellos 4 cuevas-, pero la joya de la corona son las 7 cascadas. Al final del post os dejamos los datos prácticos sobre cómo llegar, precios, horarios y demás. Una vez hayáis accedido al recinto, lo que tendréis por delante es una caminata de aproximadamente 2km en leve ascensión, en la que se pasa de los 165m a los 996m. El recorrido nos recordó mucho a la Ruta dels 7 Gorgs, de la que ya hablamos aquí. Dependiendo de vuestro ritmo y las paradas, puede llevar una hora y media llegar a la séptima cascada, la que da nombre al parque por su supuesto parecido a las tres cabezas del elefante sagrado Erawan.
Disfrutando de las Cascadas de Erawan
Aunque el camino no es de gran exigencia, es recomendable llevar un calzado “todoterreno”. Hay algunos tramos donde se acumula barro y con chancletas se hace complicado avanzar. Y en otros, directamente, es posible que tengáis que hundir los pies en agua. En cualquier caso, llevad algo de ropa de repuesto, ya que acabaréis sudados y quizá enfangados. Ah, y llevad bañador y toalla, porque está permitido bañarse en todo el recorrido. Algo muy apreciado por los rusos, por cierto. No sabemos el motivo, pero tienen mucha querencia por este lugar y los encontraréis por todas partes. En realidad, según nos han dicho, en temporada alta encontraréis mucha gente… no sólo rusos.
En cuanto al itinerario, es muy fácil seguir el rumbo correcto, puesto que las cascadas están bien señalizadas por carteles que indican distancias y nombres. En la segunda cascada encontraréis una especie de puesto de control. A partir de ese lugar está prohibido llevar comida y deberéis dejar un pequeño depósito por cada botella de agua que llevéis encima. Os marcarán las botellas y, si volvéis con ellas, os devolverán el depósito. Es una forma de asegurarse de que no dejamos basura por el parque. Después, hasta la cuarta catarata el camino va subiendo, pero hay pasarelas de madera, puentes, etc., así que no es nada complicado. Son las tres últimas las que pueden presentar alguna mínima complicación, pero merece la pena hacer el esfuerzo de llegar hasta la séptima (que muchos parecían saltarse), la más alta de todas. De hecho, el resto son de escasa altura. Más bien se trata de pequeños y escalonados saltos de agua que van formando un paisaje idílico. Es una excursión que recomendamos encarecidamente.
Cómo llegar:Desde Bangkok. Una de las mejores maneras de aprovechar el día es contratar una excursión desde Bangkok. Se ofrecen sobre todo en Khao San Road. Hay diferentes packs, que pueden incluir otras atracciones, como el Puente sobre el Río Kwai. Aseguraos que os dejan unas 3 horas en el parque si queréis completar el recorrido sin prisas. Para ir por libre casi todas las opciones pasan por llegar primero a Kanchanaburi. Explicábamos cómo llegar desde Bangkok en este post.Desde Kanchanaburi. Una vez en Kanchanaburi, la manera más simple de ir a las Cascadas de Erawan es en bus. En la estación de autobuses (ubicación) tomad el nº 8170 (sin aire acondicionado, muy viejo).
Tiene un letrero de Erawan en el propio bus y está situado en una plataforma con el cartel de Erawan, así que no hay pérdida. El trayecto es de 1h 30′ y cuesta 45 Baht. Salen de 8:00h a 17:20h cada 50 minutos. El último regresa a las 16:00h, así que atentos a la vuelta. Llegad con tiempo a la parada si es temporada alta y no os queréis quedar sin sitio. Y otro consejo: si la estación de bus de Kanchanaburi queda demasiado lejos de vuestro alojamiento, podéis tratar de preguntar por dónde para, ya que mucha gente lo intercepta en el camino. Y lo mismo a la vuelta; no hace falta que lleguéis a la estación, quizá os convenga bajar antes. Nosotros nos bajamos muy cerca del Cementerio de Guerra, ya que pasa por delante.Obviamente, podéis llegar al parque en coche o alquilando moto, como hicieron los de Mundo Nómada.
Fuente: losapuntesdelviajero.com
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